"El amigo vino consumiendo en el camino y para él fue letal, a los 10 minutos estaba muerto"

Durante la última semana toda la sociedad argentina se vio conmocionada por una serie de muertes vinculadas a una supuesta cocaína adulterada. Decenas de fallecidos y afectados en la provincia de Buenos Aires fueron los primeros pero, con el correr de las horas, comenzaron a aparecer casos en Rosario y se estudian situaciones en otros puntos del país.

Sobre esto, El Equipo de la Mañana tuvo la oportunidad de dialogar con María, quien es cuñada de uno de los jóvenes que consumió y tuvo que ser hospitalizado. "Mi cuñado sigue intubado, está estable y de a poquito va mejorando, va lento pero está vivo que es lo principal", expresó. 

Su cuñado, de quien prefiere no decir el hombre, pertenece a la triste primera ola de casos que se registraron con esta problemática. El hombre vive en Hurlingham y es empleado municipal allí. "Está en el Hospital de Hurlingham, no se lo puede trasladar". 

Sobre su situación familiar, María explicó que la víctima se encuentra separado de su hermana. "Él vive a cinco cuadras de mi casa y nos enteramos cuando llamaron por teléfono a mi hermana. No sabíamos que era tan grave, pensamos que era una sobredosis o algo de eso y cuando llegamos al hospital nos enteramos de lo que era", relató. 

La noche de su cuñado fue relatada luego en diferentes programas de televisión. Un grupo de amigos se habían juntado a ver el partido de Argentina y luego decidieron consumir. "Ellos fueron a comprar en el auto de mi cuñado, son 10 minutos hasta Puerta 8", aseguró. "El amigo vino consumiendo en el camino y para él fue letal, a los 10 minutos estaba muerto", sostuvo María.

Esta situación es una problemática que perjudica no solo la vida de quienes consumen sino de todo su entorno, sus familias y amigos. 

"Al Estado no le pedimos nada", remarcó María. "Sí le pedí al municipio que acompañe a mis sobrinos por si a mi cuñado le pasaba algo. No estábamos en un estado como para hablarles a mis sobrinos de la verdad de lo que pasaba, ellos no saben que el papá toma cocaína", relató. 

Y sobre esto insistió con que  "el municipio no hace nada, nuestros sobrinos no reciben ni siquiera la ayuda de un psicólogo".  Sobre las víctimas aseguró que "ellos están enfermos y no entienden". 

"No sé si mi cuñado se drogaba siempre o de vez en cuando porque eso no se dice, yo sé que él trabaja y se hace cargo de sus hijos de 10, 12 y 16 años", resaltó María.

Además, María remarcó que se encontraban todos muy impactados con todo lo sucedido y que, de acuerdo a la información que ella recibió, las víctimas fatales y los afectados serían más que los números expuestos oficialmente. "Yo me quedé hasta las dos de la mañana y los amigos los traían porque no le querían decir a las familias", relató sobre esa fatídica noche.