El Índice de Producción Industrial (IPI) elaborado por la Fundación de Investigaciones Económicas Latinoamericanas (FIEL) mostró en julio una contracción interanual del 5,2%, evidenciando una desaceleración en el ritmo de caída en comparación con meses anteriores. A pesar de esta leve mejora, el panorama general sigue siendo negativo para el sector industrial.

En los primeros siete meses del año, la actividad industrial acumula una caída del 10,9%, reflejando una reducción significativa en la producción en comparación con el mismo período del año anterior. Este retroceso generalizado sigue siendo una preocupación para la economía, a pesar de la desaceleración en el ritmo de contracción.

Sin embargo, no todos los sectores han sido afectados de la misma manera. La rama de alimentos y bebidas ha registrado un ligero avance en julio en comparación con el mismo mes del año pasado. Este incremento se debe principalmente a un aumento en la producción de alimentos, que ha más que compensado la caída en la producción de bebidas.

FIEL destacó algunos factores positivos dentro del sector alimentario, incluyendo “el aporte de la producción de aceites y el menor ritmo de contracción en la faena vacuna y la lechería”. Estos avances parciales ofrecen un respiro en medio de un panorama industrial en general desfavorable, sugiriendo que algunos segmentos de la industria están mostrando signos de recuperación.