Circulación del dengue en Casilda: situación actual y estrategias de control
El Ministerio de Salud del Gobierno de la Provincia actualizó los datos de la circulación viral de dengue en la provincia de Santa Fe. Desde que comenzó el año se confirmaron por laboratorio 30.690 casos de dengue en la provincia de Santa Fe. En los 19 departamentos se confirmaron positivos, aunque la ciudad de Casilda, comparada con otras localidades, tiene poca circulación.
"Casilda, en el mapa provincial, tiene un número bajo de casos confirmados de dengue. La idea es que en próxima temporada podamos trabajar en la prevención", expresó el Director de Salud, Nicolás Taraborrelli en el móvil de Radio Casilda.
En cuanto a la situación actual, Nicolás dijo "estamos trabajando con los efectores públicos y privados, allí realizando los bloqueos con casos sospechosos".
El trabajo local para enfrentar al dengue, se dividió en dos sectores, según le comentó el Secretario a la periodista Milagros Metz, "el uso de herbicida para erradicar la larva del mosquito, fue una estrategia de emergencia, dado que empezamos en diciembre. Los bloqueos de las cuadrillas que realizan fumigación lo hacen dentro de las 9 manzanas alrededor del sector donde hay un caso sospechoso. Estas tareas también se vienen realizando desde diciembre, con productos permitidos", dijo Nicolás
Importancia de la consulta oportuna
La secretaria de Salud, Andrea Uboldi, insistió en la recomendación a la población de realizar la consulta oportuna ante la aparición de síntomas: “Si la gente consulta es categorizada, es evaluada y sigue las recomendaciones, vamos a seguir acompañado con el refuerzo de los sistemas de atención en las guardias, dispositivos en algunos lugares particularmente en Santa Fe y en Rafaela para los procesos de atención y por supuesto con la articulación entre sectores públicos y privados”.
Y remarcó la importancia de sostener las actividades de descacharrado para evitar la proliferación del mosquito Aedes Aegypti, y la prevención de las picaduras: “Sabemos que este mosquito es más sensible a las temperaturas bajas, pero tienen que estar sostenidas, por eso hay que continuar con las medidas. Todavía no tenemos una lógica climática de sostener una baja temperatura, y también hay que tener en cuenta que hay informes que dan cuenta de que la especie comenzó a ser más resistente a temperaturas más bajas”.