El fin de semana pasado se vivieron instantes de sustos en cancha de 9 de Julio y Aprendices. En ambos casos, hubo una descompensación en el medio de los partidos que requirió rápida intervención médica. El doctor Raúl Radrizzani fue quien se hizo cargo inicialmente de los dos casos.

En diálogo con Radio Casilda, el especialista sanitario reveló que no son situaciones que se den con frecuencia, en ningún ámbito. Y por eso cuando se dan, son noticias. En el caso del juez Nicolás Bonicatto hubo un cuadro de convulsión, en tanto que el lateral de Huracán tuvo un síncope.

La víctima de Arequito hizo una convulsión del tipo tónico clónico, según explicó Radrizzani. “Una contracción en forma de abrazadera” que resultó alarmante por la forma en que se expresó, puesto que se desplomó contra el alambrado.

“Si la convulsión tocaba alguna parte del centro respiratorio, podía hacer un paro y estaba en peligro de muerte. No es lo más frecuente, pero puede suceder. Otra eventualidad grave es la broncoaspiración", argumentó. Y agregó que cuando llegó la ambulancia se le colocó el oxímetro para comprobar que oxigenaba correctamente.

En el caso de Joaquín Ocampo, su descompensación fue por un síncope. Un cuadro que puede o no tener pérdida de conocimiento. El rosarino estuvo inmóvil por algunos minutos. “Lo pellizqué y lo golpeé para ver si reaccionaba, le dije un nombre y no había respuesta. Sin embargo, de forma inmediato fue despertando”, contó el doctor.

Más adelante, Radrizzani aplicó maniobras de masajes en el tórax porque era la zona que le indicaba como la de la molestia. Los estudios que se hagan con posterioridad serán claves para descubrir a que se debió.