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Los habitantes de Arequito continúan en alerta y siguen de muy cerca todo lo que acontece en torno a la posible instalación de la multinacional Befesa. Mientras tanto, hay funcionarios que mantienen encuentros para asegurar el bienestar de la población.

Lo último que se sabe es que el expediente está parado a la espera de la respuesta de los responsables de la firma, quienes deben aceptar y cumplimentar un sinfín de ítems que se exigen para el normal desembarco. El pasado viernes, la que se entrevistó con César Manckler, secretario de Medio Ambiente de Santa Fe, fue la diputada provincial, Miriam Cinalli.

La legisladora aseguró que hubo un diálogo muy fluido y pudo constatar el compromiso de parte de las autoridades provinciales de llevar adelante los controles pertinentes. Befesa se dedica al reciclaje de polvo de acero y residuos de aluminio, lo que la convierte en una empresa grado III, de las más contaminantes. Aunque también es cierto que el seguimiento que se hace sobre las mismas tiene que ser más estricto.

“Si es que finalmente se concreta la llegada, ellos deberán instalarse en el lugar que les corresponda y cumplimentando todos los estudios que se le requieran. Por ahora no hay una confirmación”, manifestó Cinalli. Hace dos meses se mantuvo el último contacto con los ingenieros que debe rubricar o denegar las condiciones que se impusieron desde el Ministerio de la Producción.

Por otra parte, la diputada aseguró que el expediente está abierto a sociedad civil y cualquiera que quiera revisarlo, lo tiene a su disposición.