Micaela García: El caso que cambió todo y poco cambió
El jueves 1° de abril se cumplieron cuatro años del femicidio de Micaela García, la joven de 21 años que salió a bailar con amigas en Gualguay y fue secuestrada por Sebastián Wagner, quien luego la violó y la estranguló, dejando su cuerpo en un descampado a casi 8 kilómetros de la ciudad.
Micaela fue encontrada una semana después y Sebastián Wagner fue detenido, allí se supo que ya contaba con condenas por delitos sexuales y que había recibido la libertad condicional apenas dos días atrás. La conmoción e idignación social frente a esto fue tal que dio vida a una lucha que llevó a la creación de una ley que obliga a la formación en perspectiva de género de todos los funcionarios de los tres poderes del Estado, ejecutivo, legislativo y judicial.
Así, en 2018, se promulgó la Ley Micaela. Una respuesta a tantos años de negligencias por parte de jueces y funcionarios frente a casos de violencia de género. Hoy, la Ley Micaela se aplica también en sindicatos, universidades y diferentes instituciones de todo el territorio nacional.
Sin embargo, los casos de femicidio no han disminuido en los últimos años. De acuerdo a datos obtenidos por obervatorios y organizaciones que se dedican a estudiar los femicidios ocurridos en nuestro país, en Argentina existe un femicidio cada 30hs y, además, gran parte de las mujeres asesinadas habían ya denunciado a su agresor e incluso contaban con medidas de restricción que, claramente, no se cumplieron como debían.
Es importante no detenerse en la lucha contra este flagelo que nos deja día a día sin hermanas, hijas, madres y amigas. Es momento de analizar las herramientas que tenemos, las conquistas a las que llegamos y los eslabones que nos falta romper para terminar con esta cadena que oprime, lastima y descarta a cientos de mujeres en nuestro país.
El caso de Micaela fue tan triste como paradigmático, es muy conmovedor verla con la remera de Ni una menos, luchando por un mundo mejor. Ese mundo mejor que, a Micaela y a todas las demás, aún les debemos.
Durante estos días, la fundación que lleva su nombre creó la campaña digital #MicaPresente y, entre relatos, fotos y videos, la recordaron con emoción y amor en redes sociales.