Gustavo Lechner, ex árbitro nacional y actual presidente de Cadep, una de las instituciones que presta servicios arbitrales en la Liga Casildense de Fútbol, se refirió a una situación de tensiones internas que ha derivado en la salida de algunos de sus grandes valores. En entrevista con ‘Crónica Deportiva’, reconoció que las divisiones y aclaró que está sucediendo. "Entre los seres humanos existen diferencias. Nosotros tenemos hoy un colegio de 120 árbitros. Hay discusiones por ideas, no nos podemos poner de acuerdo en todo", afirmó.

Uno de los hechos más destacados fue la salida de Matías Santiago, árbitro que llegó a Cadep desde la Asociación Rosarina, de la mano de Pablo Ocampo, con el objetivo de progresar en su carrera. 

Santiago quedó en el ojo de la tormenta hace algunas fechas atrás cuando fue removido del clásico de Pujato, que tenía que dirigir, debido a una filtración de la designación el día anterior. Posteriormente, decidió alejarse de Cadep. Lechner no dudó en buscar al responsable y contó: "Se fue cansado de la no respuesta por parte de Ocampo. Quien no le dirigía la palabra ni le respondía mensajes. Desconocíamos esa situación, nos enteramos ahora".

El árbitro original para el clásico de Pujato era Franco Campos, pero fue requerido para llevar adelante una semifinal en la Liga Deportiva del Sur, por lo que se decidió que Santiago lo reemplazara. La designación fue comunicada sólo a tres personas: Juan Serenelli, responsable de los árbitros en Casilda, Ocampo, designador de Cadep, y Lechner.

Más adelante, se dejó entrever que otros jueces también tomaron la decisión de marcharse de la misma asociación. Entre ellos, Abel Gatica, Nahuel Biagiola, Alejandro Portillo y el mismo Pablo Ocampo. Según Lechner, se relación con éste último, era meramente profesional. "Nunca fui su amigo. Él cumplía una función dentro de la institución y yo otra. Simplemente recibía una tarea que le delegaba en una determinada área. Era el designador, por lo cual se le pagaba un sueldo", aclaró.

Tras el Santiago-Gate, el ahora ex designador terminó dando un paso al costado. Envuelto en sospechas y mirado de reojo. Lechner incluso lo encaró y se lo hizo saber el día que presentó su renuncia.

Más adelante en la charla, el referente de Cadep adujo que Gatica “se fue hace dos meses” debido a que ya no podía dirigir en algunas ligas. Incluso fue apuntado por una polémica decisión en Sanford dentro del ámbito de la Casildense. Mientras que Biagiola se despidió con una carta de agradecimiento, también hace un tiempo atrás. Ninguno de ellos estuvo ligado al alejamiento de Ocampo.

Por su parte, la situación de Portillo se remonta a una cuestión de ego. Luego de expresar su malestar por no haber sido designado en dos fines de semana consecutivos, en una época en la cual no abundaban los partidos importantes. 

Pablo Ocampo y Gustavo Lechner, cero química.