Para alguien que nació por estas tierras, es complicado imaginar el camino que desandó Héctor Cúper, pero el chabasense realizó una cerrera formidable. Como jugador dejó una impronta en el Ferro de los años '80 pero como técnico su periplo recorrió grandes sitios y hoy, está en uno al menos curioso.

Después de conducir a Huracán y Lanús en la Argentina, su trayectoria europea lo dotó de prestigio. Sorprendió en Mallorca, causó impacto en Valencia y trepó hasta conducir al Parma e Inter en Italia. En estos tiempos, dejó los clubes y pasó a ser seleccionador. Tuvo una expererincia en Giorgia y ahora la vida lo llevó a Egipto.

Desde hace un año maneja los destino de la asociación que lo contrató hace casi dos años, con la que buscará revalidar la condición de candidato en el certamen continental. Actualmente disputa la Copa África, y ostenta ser entrenador del conjunto que más veces la ganó pero que hace tres ediciones no disputa la competencia.

Hasta el momento, empató con Mali y derrotó a Uganda y el miércoles enfrentará a Ghana, líder del grupo D. Lo curioso es que los dos arqueros principales de Egipto se lastimaron y el tercero en la consideración ahora es titular. Se llama Essam El Hadary y tiene 44 años.