A más de una semana del fallecimiento de Ramón Lovaiza y Martín Roldán, se volvieron a abrir las puertas de la Comuna de Pujato. Sin embargo, las actividades no son totalmente normales. Hubo un avance en las negociaciones de parte del gremio para que se trabaje la mitad de la jornada estipulada, es decir durante tres horas.

Mientras tanto, se sigue discutiendo respecto de quien será el que ocupe el cargo de capataz en el Corralón. “Que la situación se normalice por completo depende de las negociaciones que se entablen de ahora en adelante. Por esta semana se mantiene de esta forma”, aseguró es este medio de comunicación una alta fuente sindical.

El horario que se realiza es de 7 a 10. Posteriormente, los trabajadores se concentran en el Corralón sin realización de actividades hasta que se retira.

A su vez, es importante hacer saber que los familiares apoyaron la medida del gremio. Entendiendo que se trata de una situación en beneficio de la comunidad de local. De todas maneras siguen reclamando justicia y esperan un gesto de parte del presidente comunal Daniel Quacquarini.