El lugar permite a los asistentes exorcizar penas a través de la música, especialmente con canciones de desamor y un toque de karaoke.

La propuesta incluye tragos inspirados en canciones de despecho, como "Rata Inmunda" y "Ya te olvidé".

"El despecho no solo se relaciona con el amor, también se siente cuando uno pierde un trabajo o se separa de un amigo", La atmósfera invita a la interacción, donde los clientes pueden cantar desde sus mesas o animarse a subir al escenario.

La afluencia de público es notable, con un 80-90% de mujeres, aunque también asisten hombres y grupos de amigos.